Análisis
¿Quién es Rodrigo Paz, el nuevo presidente electo de Bolivia?
Es el rostro de una Bolivia que quiere modernizarse y dejar atrás los conflictos de los últimos años. Su mandato será una prueba de su capacidad para construir consensos y cumplir las expectativas de una sociedad que pide cambio, pero también estabilidad
20 de octubre, 2025
Por: Polianalítica
En octubre de 2025, Bolivia vivió una elección histórica que cambió el rumbo político del país. Tras casi dos décadas bajo el liderazgo del Movimiento al Socialismo (MAS), los bolivianos eligieron a Rodrigo Paz como su nuevo presidente, marcando un claro giro hacia una propuesta de centro-derecha que promete renovación y cambio.
El proceso electoral se desarrolló en un contexto complicado, Bolivia enfrenta una crisis económica marcada por la inflación, escasez de combustible y un desgaste general en la confianza hacia el gobierno anterior. En la primera vuelta, Rodrigo Paz sorprendió a muchos al obtener cerca del 32% de los votos, lo que le permitió pasar a la segunda ronda electoral, dejando atrás a candidatos tradicionales, incluido el MAS. En la segunda vuelta, celebrada este 20 de octubre, Paz se impuso con un 54,5% de los votos, confirmando así el deseo de gran parte del país de apostar por un nuevo rumbo político.
Pero, ¿quién es Rodrigo Paz? Nacido en 1967 en España durante el exilio de su familia, es hijo de Jaime Paz Zamora, presidente de Bolivia entre 1989 y 1993. Rodrigo ha construido su carrera política principalmente en el departamento de Tarija, donde ha sido diputado, alcalde y senador. Su formación en economía y relaciones internacionales le ha dado un perfil técnico que combina con una imagen fresca y moderada, muy distinta a la polarización que ha marcado la política boliviana en los últimos años.
Durante su campaña, Paz defendió un “capitalismo para todos”, una propuesta que busca fomentar el crecimiento económico sin descuidar los programas sociales. Su mensaje logró captar el apoyo tanto de emprendedores y sectores urbanos como de poblaciones rurales que buscaban un cambio, pero sin rupturas radicales.
Ahora, como presidente electo, Rodrigo Paz enfrenta importantes desafíos, estabilizar la economía, controlar la inflación, recuperar la confianza internacional y mantener un equilibrio político que le permita gobernar sin mayoría absoluta en el Congreso. Su mandato será una prueba de su capacidad para construir consensos y cumplir las expectativas de una sociedad que pide cambio, pero también estabilidad.
En resumen, Rodrigo Paz es el rostro de una Bolivia que quiere modernizarse y dejar atrás los conflictos de los últimos años, aunque el camino por delante será complicado. Su historia y reciente triunfo electoral reflejan un país que busca un nuevo capítulo con esperanza, pero consciente de los retos que vienen.