Este lunes, el presidente Donald Trump, en rueda de prensa desde la Casa Blanca, declaró emergencia criminal en la ciudad capital de Washington DC.

Anunció la movilización de la Guardia Nacional como parte de una campaña para controlar el crimen y “restablecer el orden público” en la ciudad.

Reconocido como "el día de la liberación de Washington", el presidente Trump enfatizó que "el crimen, el salvajismo, la inmundicia y la escoria desaparecerán", dando por terminado "los días de los asesinatos o ataques sin piedad contra personas inocentes”.

Entre las medidas impuestas por Trump, está el despliegue de la Guardia Nacional con alrededor de 1.000 efectivos, pese a la resistencia de las autoridades locales que insisten en que los datos no reflejan el supuesto aumento de la delincuencia al que alude el mandatario.

Finalmente, Trump sostuvo que se basó en el asesinato de un pasante del Congreso de 21 años y la golpiza a un miembro del personal de DOGE durante un intento de robo de automóvil, y que planea implementar la política en otras ciudades plagadas de delitos, destacando los problemas en Nueva York y Chicago.

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