Sostuvo que el túnel, que pasaría por debajo del estrecho de Bering, desbloqueando la exploración conjunta de los recursos naturales y "simbolizaría la unidad", siendo "el sueño de un enlace entre Estados Unidos y Rusia a través del estrecho de Bering" además reflejaría "una visión duradera, desde el ferrocarril Siberia-Alaska de 1904 hasta el plan de Rusia de 2007".