"Fue entonces cuando Hamás entendió que se enfrentaba a su aniquilación. Si hubiera escuchado a los que me decían aquí y en la calle que había que detener la guerra... habríamos muerto y esto habría terminado con su victoria y la de todo el eje iraní".
También sostuvo que no hubiese dejado que la guerra "terminara con los términos establecidos por Hamás y con la ayuda de gobiernos de todo el mundo, con la ayuda de la prensa internacional", agregando que "reforzamos la capacidad de contención de Israel y trajimos de vuelta a nuestros rehenes, a todos los vivos, algunos de los muertos, que siguen allí, también serán traídos de vuelta".
Finalmente, el líder israelí sostuvo que "hemos cimentado nuestro estatus como superpotencia, pero esto no ha terminado", aún "existe, y seguirá existiendo, un alto precio a pagar por agredirnos", dijo.